Liceo Comercial de Tomé

Editorial

Saludos desde Orientación

El mundo cambió en un instante y nacimos en un día, luego “Anduvieron días iguales persiguiéndose” y cada hora, lenta, lenta, fue un “largo viaje hacia la noche”.

Volvimos a nacer. Mi experiencia de hoy es diferente: cada día de cuarentena corre demasiado veloz e invisible. Qué hacemos, pensémoslo bien antes de abrir los ojos a la pandemia, en este suspendido amanecer.

Y en este crepúsculo pandémico, contagiemos de risas y buenas emociones. La risa siempre sana y coloca al cuerpo en una situación favorable. Es compulsiva, catártica, la risa se contagia, la gente se permea, ríe uno y terminan riendo todos (tenemos como buen ejemplo las “tallas” en la sala de clases).

¿Por qué es necesario reír?. Porque sentimos impaciencia ante el mal sin horizonte. Hoy la enfermedad de moda no es sólo el calvario de un cuerpo individual, la gran enfermedad es la amenaza de la enfermedad.

La nueva normalidad nos ha llevado a vivir de una forma diferente: ¿desde cuándo que no abrazamos?, no estábamos acostumbrados al afecto sin contacto.

Estimados padres y apoderados: todos poseemos cualidades innatas que debemos saber aprovechar, de ellas depende lo que somos hoy y lo que seremos mañana. Les invito a reconocer en sus hijos, en sus seres más queridos, aquellas cualidades, a no enterrar sus talentos, porque “a cada uno se le ha dado conforme a su capacidad”. Paciencia, paciencia y amor.

Queridos estudiantes: les invito a recordar un buen momento, así nos sentiremos felices de nuevo, porque nuestros recuerdos son uno de los bienes más valiosos que poseemos. La fuerza de nuestros sentimientos puede llevarnos a realizar grandes cosas en la vida. En este encierro obligado, ayuden a sus padres, abuelos, a sus seres queridos. Hoy, sobre la espalda de sus padres se ha puesto una carga muy pesada, una cruz difícil de llevar, pero si ustedes están ahí con ellos, pueden “entre todos” transformar la cruz en dos simples maderos. Entre todos no habrá cruz. A todos mis “Cariños” les espero sin plazo ni tiempo.

Mis sentimientos hacia ustedes, hacia todo lo que significa Liceo Comercial de Tomé es un sentimiento que puede durar toda la vida, más allá del tiempo y el espacio. Yo creo en mi corazón, “el que yo exprimo para teñir el lienzo de la vida”.

Atentamente

Angélica Muñoz Muñoz
Profesora
Orientadora